La mayor preocupación para quienes han conseguido la estabilidad profesional que tanto buscaban es encontrar una manera de maximizar sus ahorros para algún día lograr la independencia financiera que les permita lanzar su propio negocio.
Gracias al avance tecnológico y a las mejoras en materia de conectividad alcanzadas por internet, hoy es muy sencillo encontrar variables para mejorar el rendimiento de nuestro capital. En el siguiente artículo, te comentamos todo lo que debes saber para mejorar tus ahorros.
Este año tan excepcional en la historia de la humanidad moderna ha llevado a que muchas personas piensen en distintos métodos de ahorro para intentar cierta predictibilidad en medio de un contexto en donde reina la incertidumbre.
Así como internet ha sido un gran aliado para el entretenimiento y la conexión con los demás durante la pandemia, también ha sido de gran eficacia para el manejo de las cuentas y para la educación económica y financiera de pequeños y grandes ahorradores.
Tabla de Contenidos
Internet: una herramienta útil para la economía
En esa dirección, hoy en día existen diferentes portales, aplicaciones y herramientas ideadas para hacer la tarea dura mucho más sencilla y práctica.
Por solo citar un ejemplo, existen sitios como IntelBanca en el que se comparten artículos, reseñas, información sobre todo lo relacionado a los instrumentos más populares para manejar la economía cotidiana: créditos, préstamos personales, inversiones, tarifas, información bancaria y mucho más.
En ese sentido, internet ha favorecido la expansión de sitios como este en el que se comparan los mismos servicios ofrecidos por distintas compañías, así como ver qué tipo de rendimiento conviene más o la calificación de los usuarios del servicio prestado.
En el marco de la pandemia, un sinfín de personas nos hemos preguntado dónde y cómo depositar nuestro dinero para salvaguardar su valor y, en la medida de lo posible, ponerlo a producir beneficios extras.
Esto ha despertado dos tipos de comportamientos: los que han podido acompañar a su salario regular, como aquellos que han visto una gran oportunidad de lograr la independencia financiera para dedicarse a sus verdaderas pasiones, ya sean vinculadas al arte, al deporte o al emprendedurismo.
Por ejemplo, en internet podremos encontrar todo lo necesario para comenzar nuestro propio emprendimiento.
En caso de que los ahorros no sean suficientes o queramos contar con una mayor holgura, a un puñado de clics de distancia hallaremos todo lo necesario en relación a los cuáles son los diferentes tipos de préstamos en el marco de la pandemia de Coronavirus.
Lo mismo sucede con una de las grandes estrellas de este momento: los mini créditos online, un instrumento financiero que ha servido a muchas personas y pequeñas empresas para compensar los efectos de la crisis. Ahora bien, volvamos al tema central de este artículo: el ahorro.
Tips para ahorrar
Tal como hemos señalado anteriormente, este año la economía mundial vive momentos atípicos y la necesidad de ahorrar ha calado hondo para muchas personas. En ese sentido, nunca está de más recordar el viejo proverbio chino que afirma que toda crisis es una oportunidad.
El contexto actual de retracción de la economía, así como una menor movilidad y posibilidad para viajar, ha hecho que muchas personas descubran los beneficios del ahorro y las posibilidades que una buena estrategia respecto a nuestras cuentas personales pueden representar en nuestra vida diaria. Así, con pequeños gestos, se pueden lograr grandes resultados a la hora de la planificación cotidiana.
Pospón los gastos prescindibles
En primer lugar, evitar todos los gastos prescindibles. Aunque parezca algo mínimo, esa pequeña chocolatina que se consume todos los días de camino al trabajo puede ser el impedimento para disfrutar en un mejor hotel en nuestras próximas vacaciones o empezar un mes antes con nuestro propio proyecto comercial.
En ese sentido, hay un lema que todo millonario sostiene: las grandes fortunas no se construyen de un día para el otro. Una mayor disciplina en todas esas compras que responden más al impulso que a la necesidad pueden hacer la gran diferencia.
A este tipo de gasto se lo suele conocer como “gasto hormiga”: pequeño, intrascendente y cotidiano, muchas veces no se lo suele observar. Sin embargo, al igual que esos diminutos insectos en nuestros jardines y plantas, pueden causar grandes estragos.
Traza objetivos
En segundo lugar, es fundamental trazar objetivos. Cuando hablamos de objetivos, siempre es bueno ser sincero y razonable y no crear metas imposibles que solo pueden causar desánimo, enojo o simplemente ganas de abandonar todo.
A la hora de planificar, es imprescindible hacer un análisis en frío de la situación e incluso empezar con números un poco menores a los posibles para estimular el ánimo y sorprendernos con los resultados.
Así, cada mes puede exigirse un poco más y ver un crecimiento sostenido tanto en nuestra cuenta como en nuestra proactividad financiera. Al igual que con el deporte, querer saltearse etapas puede causar más problemas que beneficios para la salud, aunque este caso sea la salud de nuestra billetera o cartera.
En esa dirección, y al igual que mencionamos al comienzo de este artículo, internet puede ser de gran ayuda para controlar nuestras finanzas en el día a día.
En medio de las obligaciones y distracciones, es común que ocurran descuidos o equivocaciones que arruinen nuestras cuentas y planes. Es por eso que existen diferentes aplicaciones que nos permiten ver gráficos de nuestros gastos, así como anotar de manera ordenada y detallada cada uno de ellos y avisarnos cuándo superamos nuestro objetivo o si este mes hemos tenido un pequeño excedente.
Información y formación
Otro punto importante para mejorar tus ahorros y que muchas veces no se tiene en cuenta es que para ahorrar es importante fomentar el conocimiento y desarrollo.
Así, a la hora de tomar decisiones como invertir en un plazo fijo o en movimientos más arriesgados como comprar acciones en la bolsa, es importante revisar la información de cada una de las partes, ver tendencias de mercado, estar al tanto de la agenda política y económica nacional e internacional, entre muchas otras cuestiones.
Si bien puede parecer algo demasiado engorroso, en realidad no lleva más que una o dos horas diarias revisar todo lo que atañe a nuestras finanzas personales. Adquirir esa constancia es el primer gran paso.
Por ejemplo, a la hora de planificar colocar nuestros ahorros en una entidad financiera como puede ser un banco tradicional o un fondo de inversión, es interesante revisar experiencias de otros usuarios.
También la situación jurídica de esa entidad y los beneficios que ofrece en comparación a otros usuarios. Como destacamos anteriormente, hoy en día existen diferentes sitios que pueden hacer de esa tarea algo sencillo y hasta entretenido.
Por último, aprende a distinguir necesidades de deseos. ¿Quién no quisiera tener el último modelo de automóvil? Ahora bien, ¿realmente lo necesitas? Esas preguntas que parecen obvias no siempre logran mediar entre la acción y el gasto, lo que muchas veces lleva muchas veces a que el impulso arruine nuestras ideas y proyectos.
Como habrás visto, a la hora de ahorrar, se necesita mantener la calma y ejecutar cada paso con la mayor frialdad. Los resultados justificarán ese esfuerzo.
Juan del Real Martín
Soy economista por la Universidad Complutense de Madrid, especialización Finanzas. He alcanzado la independencia financiera y me gustaría ayudar a los demás a entender mejor los asuntos de dinero y a tomar las decisiones adecuadas en cada momento de la vida. La educación financiera es básica para que puedas lograrlo tú también.
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