Para una buena gestión de cualquier empresa, es importante saber qué es el fondo de maniobra (también llamado fondo de rotación o capital corriente) y cómo gestionarlo correctamente. En esta entrada vamos a tratar de explicar este concepto de forma clara.
Tabla de Contenidos
¿Qué es el fondo de maniobra?
El fondo de maniobra es el pasivo no corriente y patrimonio neto de una empresa, destinados a financiar el activo corriente.
Dicho de otro modo, es un fondo que está compuesto por todos los recursos financieros a largo plazo que permiten a una empresa seguir con su actividad a corto plazo.
El término «fondo» habla por si sólo y es sinónimo de disponibilidad. Y el término “maniobra” se refiere pues a la capacidad o margen de operar que este fondo proporciona al empresario.
Fórmula de fondo de maniobra
Así que, para saber en qué estado se encuentra la salud financiera de nuestro negocio, es fundamental saber calcular el fondo de rotación o de maniobra.
La fórmula para hacerlo es muy simple:
Fondo de maniobra = Activo Corriente – Pasivo Corriente
El activo corriente o activo circulante es básicamente el dinero que hay en las cuentas bancarias (lo que se conoce como tesorería), las existencias y las deudas de nuestros clientes. Se trata de disponibilidades.
Por su parte, el pasivo corriente lo forman las deudas y provisiones a corto plazo, entre otras cosas.
El saldo que arroja esta operación se traduce en liquidez o la capacidad de nuestra empresa a la hora de afrontar los pagos y obligaciones más inmediatos.
Es decir, que el fondo de rotación o de maniobra es la capacidad de disponer de lo necesario para poder operar con normalidad en el corto plazo (aunque algunos expertos amplían este plazo hasta 12 meses).
De ahí la importancia de aplicar la fórmula de fondo de maniobra y mantener siempre bajo control esta cifra tan relevante para la salud financiera de .
Un indicador de salud financiera
Cuanto más grande sea nuestro fondo de maniobra, más saneada estará nuestra empresa.
Este es uno de los indicadores más fiables sobre la salud financiera de cualquier negocio.
Las tres situaciones que se pueden dar después de aplicar la fórmula del fondo de maniobra, son estas:
- Saldo positivo: esto es lo más deseable para las finanzas. Un fondo de rotación positivo es sinónimo de empresa saneada.
- Saldo cero o cercano al cero. Situación en la que pueden aparecen problemas de liquidez que requieran abrir líneas de crédito.
- Saldo negativo, lo cual significa problemas. Hay que interpretarlo como una señal de alarma. Los activos a corto no son capaces de atender las necesidades y pagos a corto.
¿Qué ocurre en el caso de tener un fondo de maniobra negativo?
Evidentemente, este no es precisamente el escenario más idóneo para una empresa. Un fondo de maniobra con saldo negativo significa que el pasivo corriente es superior al activo circulante.
En otras palabras: con un fondo de maniobra negativo, la empresa no dispone de los recursos suficientes para afrontar los gastos y obligaciones más urgentes.
Una posición como esta, siempre que se trate de algo puntual, no tiene porque ser especialmente grave.
Hay modos de revertir la situación gestionando mejor la tesorería, los pagos a proveedores y los cobros a clientes.
Sin embargo, si se mantiene en el tiempo puede conducir a escenarios más complicados e incluso a la suspensión de pagos en un horizonte temporal no muy lejano.
Conclusión
Mantener siempre un saldo de fondo de maniobra positivo es la garantía de que nuestro negocio o empresa va a poder funcionar con normalidad, sin faltar a ninguna de las obligaciones más inmediatas.
Conocer en todo momento nuestro fondo de rotación nos va a permitir saber cuál es nuestra capacidad de maniobra. También nos ayudará a determinar cuáles son los niveles mínimos de stock y tesorería con los que debemos contar en el corto plazo.
Por último, hay que advertir que del mismo modo tampoco es recomendable pecar por exceso. Disponer de un fondo de maniobra demasiado grande no es eficiente para ningún negocio.
Esto podría significar mantener recursos inmovilizados de forma innecesaria, desaprovechar fondos que se podrían destinar a otros fines.
Juan del Real Martín
Soy economista por la Universidad Complutense de Madrid, especialización Finanzas. He alcanzado la independencia financiera y me gustaría ayudar a los demás a entender mejor los asuntos de dinero y a tomar las decisiones adecuadas en cada momento de la vida. La educación financiera es básica para que puedas lograrlo tú también.
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