Curso sobre ahorro

Me llamo Juan del Real, soy economista y te presento el Curso sobre ahorro dentro del Programa de Educación Financiera #Finlit.

El ahorro es la parte de la renta familiar que no gastamos y que podemos guardar (mejor invertir) para necesidades futuras. El ahorro es la parte más importante de la educación financiera. Sin ahorro no puede haber inversión, y difícilmente endeudamiento «sano».

Este Curso sobre ahorro de #Finlit te explica qué hay que hacer para poder ahorrar algo de dinero cada mes según los diversos autores que han escrito sobre el tema.

Orígenes del ahorro

El ahorro no es nuevo. Desde tiempos antiguos, antes de que se inventara el dinero como medio de cambio, las civilizaciones se han tomado en serio la necesidad de ahorrar para prever futuras necesidades de algo. En Egipto se guardaba el cereal y los frutos de las cosechas obtenidas de las crecidas del Nilo para ahorrar y prepararse para los meses de escasez. A partir del siglo IV AC, en la Grecia clásica se crean bancos públicos, administrados por funcionarios para prestar dinero a crédito, recaudar impuestos y acuñar moneda. En 1462 se fundó la primera organización dedicada al ahorro, un «Monte de piedad», para proteger a sus integrantes de cualquier siniestro como el robo parcial o total.

Por qué no ahorramos

Ahorrar significa hacer el esfuerzo de reservar una parte de tus ingresos hoy para disponer de ella (gastarla o invertirla en un bien duradero o disfrutarla en tu jubilación) más adelante. Parece una obviedad, pero si al final de cada mes ahorras dinero es porque gastas menos de lo que ingresas.

Los españoles ahorramos poco (menos que los asiáticos) por dos razones: porque ingresamos poco y lleva a muchos a una situación de pobreza material. Y porque solo ahorramos cuando vienen mal dadas (ahorro irreflexivo versus ahorro planificado).

Este gráfico del ahorro familiar en España muestra que es verdad que en época de vacas flacas ahorramos más. Pero lo hacemos de forma irreflexiva y guiados por el miedo al corto plazo. Pero el ahorro planificado para el futuro es otra cosa y tiene más que ver con las metas que nos fijamos a medio y largo plazo.

Y no ahorramos de forma planificada por tres razones: porque nos encanta procrastinar (dejar para mañana lo que deberíamos hacer hoy). Porque no tenemos el hábito de ahorrar o de destinar a ahorro la primera porción de la tarta de ingresos mensuales que recibimos. Y en tercer lugar por la gratificación instantánea que experimentamos consumiendo hoy opuesta a la renuncia y sacrificio presentes por una promesa de beneficio futuro intangible hoy que es el ahorro planificado.

Definiciones de ahorro

El ahorro es una de las palabras clave más importantes en educación financiera o finlit.

El ahorro es la parte de la renta disponible de una persona o unidad familiar que no es gastada en bienes y servicios y que se destina a gastos de emergencia e inversiones.

Según Wikipedia,

el ahorro depende fundamentalmente de la cantidad de ingresos que obtenemos (las rentas), ya que de los gastos del presupuesto familiar hay una parte que es necesario gastar cada mes (artículos y servicios de primera necesidad).

El ahorro de las familias es menor cuanto menores sean los ingresos familiares por la necesidad de atender los escasos ingresos una serie de gastos imprescindibles o gastos de subsistencia (vivienda, suministros, alimentos, transporte, etc.).

Definición de la RAE

Según el diccionario de la RAE, se puede entender el ahorro tanto como el montante en euros que logramos guardar en un período de tiempo (diferencia entre lo que ingresas y lo que gastas), cómo la acción de ahorrar y también como la cosa que se ahorra (ahorro de combustible, ahorro energético, etc.).

El ahorro (la acción de ahorrar), es

«la acción» (y el resultado) «de separar y apartar una parte del ingreso mensual que obtiene una persona o familia con el fin de guardarlo para un futuro».

Esta idea de guardar una parte de nuestros ingresos actuales (como en el cuento de la cigarra y la hormiga), y el hábito de hacerlo por sistema a lo largo de nuestra vida, es la base de una buena salud financiera, con la que atender los imprevistos futuros y la jubilación.

Ahorro en Economía

Para la teoría económica el ahorro es la parte de los ingresos de cualquier unidad económica (persona, familia, empresa, economía) que no se dedica a consumo. Según los economistas, el ahorro es el excedente de cualquier unidad económica al final de un periodo de tiempo.

Un ejemplo: si tus padres te dan 50 euros para salir un sábado por la noche decimos que esa es la previsión de gastos que tendrás en tu salida. Si una vez en marcha, sales, te tomas algo y en vez de volver en taxi a casa te trae un amigo, evitas gastarte los diez euros de un Uber, dejas de gastar 10 euros contra lo previsto y ahorras diez euros que podrás meter en tu hucha.

Ahorro e inversión

Siguiendo con la teoría económica. Existen en Economía diferentes formas de ahorrar, cada una con instrumentos financieros para poder ahorrar e invertir al mismo tiempo. Y el ahorro lo pueden realizar tanto personas, familias, empresas e incluso naciones.

La ciencia económica estudia cómo las familias depositan la cantidad ahorrada en cada período de tiempo en depósitos bancarios u otros activos a corto plazo. Y también en activos a medio y largo plazo como fondos de inversión, planes de pensiones, PIAS, PPAs, CIALP, etc., a cambio de una remuneración. Esta remuneración varía en función de los tipos de interés (ahora mismo por los suelos), del plazo a corto, medio o largo de la inversión. Y del riesgo.

Con las cantidades ahorradas por las familias e invertidas en productos de ahorro, los bancos pueden a su vez prestar ese dinero a otros agentes en forma de préstamos (financiación del consumo) o de inversión y cobrar un precio por ello.

Esto explica la relación directa entre el ahorro y la inversión que se materializa en la fórmula siguiente:

Ahorro = Inversión

Igual que en el presupuesto familiar el ahorro es la diferencia entre lo ingresado y gastado en un período, en el mundo de las empresas, la parte de los beneficios que no se destina al pago de impuestos ni es repartida en forma de dividendos a los accionistas es ahorro.

Ahorro y previsión

El ahorro, por tanto, nos permite prever y evitar desembolsos futuros inciertos que nos puedan ocurrir. Lo más previsible que nos puede pasar al nacer es que alguna vez muramos. Pero mejor hacerlo de mayores que jóvenes, dejando a una familia sin medios de subsistencia. Por eso hay que ser previsores.

Esta previsión futura nos la dan los seguros de vida, que en contra de lo que se cree, no sólo cubren la posibilidad de que el asegurado fallezca (los beneficiarios obtienen un capital en caso de fallecimiento del asegurado) o quede inválido.

Los seguros de vida también sirven para ahorrar. Los seguros de vida-ahorro son un buen producto de ahorro para la jubilación, con un rendimiento (interés técnico) asegurado (o no).

La paradoja del ahorro

Terminando con la teoría económica. La paradoja del ahorro o paradoja de la frugalidad o austeridad) dice que cuando las familias y las empresas temen que la situación económica va a ir a peor, priorizan y miran más en qué lo gastan, gastan menos, y por tanto ahorran más dinero que lo habitual. Ya ves, el ahorro irreflexivo que decíamos al principio de este capítulo de nuestro Curso sobre ahorro.

Pues bien, esta situación familiar provoca una “contracción” de la demanda de la familias provoca una contracción económica. Al haber menos consumo porque ahorramos más, las empresas venden menos de lo esperado, reducen su producción y tienen incluso que despedir a algunos de sus empleados.

Por eso debemos ahorrar de forma planificada pensando en metas a medio y largo plazo, y no tanto de forma irreflexiva, llevados por el miedo a la incertidumbre a corto plazo.

Bien. Ya hemos visto qué es el ahorro. Pero para poder ahorrar algo de dinero cada mes hay un principio sencillo y contundente (ver los 6 principios de educación financiera de nuestro Curso EduFin). El principio del «Págate a ti mismo primero». Veamos en qué consiste este principio en el siguiente capítulo de este Curso sobre ahorro.