Cualquiera, sea cual sea su poder adquisitivo, puede invertir en oro y encontrar así un modo de asegurar su patrimonio ante la perspectiva de un futuro marcado por las turbulencias financieras y la crisis económica.
Existen dos maneras de invertir en oro: a través de acciones o de fondos cotizados (ETFs) o bien comprando oro físico. A continuación analizamos cada una de ellas:
Tabla de Contenidos
Inversión en Fondos cotizados (ETFs)
Una forma muy fácil de invertir en oro es a través de un fondo cotizado (exchange-traded fund o ETF por sus siglas en inglés) o bien invirtiendo en acciones de compañías mineras. Ambos son productos financiero que se pueden contratar y gestionar a través del banco donde tengas tus ahorros.
Ventajas
Las principales ventajas de invertir en oro a través de ETFs son:
- Gestión sencilla a través de un banco o gestor de fondos.
- Gracias a la cotización del oro, que suele ser inversamente proporcional a la tasa de inflación, nuestros ahorros estarían protegidos.
Desventajas
Las desventajas de esta opción son:
- El oro no está directamente en nuestras manos, dependemos de intermediarios.
- En caso de situación económica de especial gravedad, estos productos no están a salvo de una eventual intervención por parte del Estado.
Valorando estos pros y contras, los expertos en inversión en oro suelen aconsejar la compra de oro físico, que ofrece más garantías de seguridad y, sobre todo, nos permite tener nuestra inversión literalmente al alcance de la mano.
Comprar oro físico
En un mundo cada vez más digitalizado en el que la mayoría de gestiones se realizan online parece un sinsentido apostar por esta modalidad a la hora de invertir. Pero precisamente es ahí donde radica el principal valor del oro como vehículo de inversión.
El oro físico es un seguro a prueba de cualquier tipo de adversidad económica, especialmente valioso en momentos en los que la economía se vuelve impredecible (inestabilidad bancaria, bajos tipos de interés, volatilidad en los mercados, emisión masiva de moneda por parte de los bancos centrales, etc).
Ventajas
Las ventajas de invertir en oro físico son:
- Nos permite tener control y el seguridad sobre nuestro patrimonio frente a cualquier crisis financiera.
- Está a salvo de posibles acciones por parte del Gobierno orientadas a incautar la riqueza de los pequeños ahorradores (como se demostró a propósito del famoso “corralito” en Argentina, aunque hay muchos más ejemplos a lo largo de la historia).
- Es un bien que no se deteriora ni genera costes de mantenimiento. Además, conserva su valor intrínseco a lo largo del tiempo.
Desventajas
- Disponer de oro físico requiere realizar una mínima inversión en seguridad, ya sea adquirir una caja fuerte o bien pagar por un servicio de custodia. Guardar todo el oro en casa no es buena idea.
¿Dónde guardar el oro físico?
Un modo de eliminar este riesgo es tener el oro en un almacenamiento segregado, por ejemplo en la caja de un banco. Algunos expertos opinan que, a fin de conseguir cierta diversificación geográfica y a partir de cierto volumen de oro, es incluso mejor hacerlo en un banco en el extranjero.
Como alternativa a las cajas de seguridad de los bancos están las empresas que, además de vender monedas y lingotes, ofrecen a sus clientes el servicio de custodia de los mismos, conocido como sistema vault en inglés.
La principal ventaja es que el precio de este servicio suele ser menor que el que nos cobran los bancos por el uso de sus cajas fuertes bancarias. Obviamente, lo más prudente es recurrir a los servicios de una empresa de fiabilidad contrastada.
Juan del Real Martín
Soy economista por la Universidad Complutense de Madrid, especialización Finanzas. He alcanzado la independencia financiera y me gustaría ayudar a los demás a entender mejor los asuntos de dinero y a tomar las decisiones adecuadas en cada momento de la vida. La educación financiera es básica para que puedas lograrlo tú también.
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