Una de las salidas profesionales para cualquier persona que se enfrenta desde hace demasiado tiempo al duro mercado de trabajo es montarse una actividad por cuenta propia o crear una empresa, aunque sea una pyme. Son momentos difíciles para los autónomos, pero si se domina un arte o si se es experto en una materia, emprender puede ser una solución. En este post vemos las principales ventajas e inconvenientes de hacer un cambio profesional para montárselo solo. Y la ayuda que te puede brindar una gestoría, de la mano de Gestiun Madrid.
Tabla de Contenidos
Tú en qué eres bueno
Lo primero que tienes que hacer cuando le estés dando vueltas a un cambio profesional de rumbo es preguntarte qué es lo que se te da bien.
Cuánta gente tiene una titulación en X y luego terminan haciendo una tarea que hubiera aconsejado otra titulación. Cuántas personas estudian para convertirse en X y terminan trabajando en Y, que no tiene nada que ver. En muchas personas, este desenfoque termina rompiendo en algún momento.
Mi segundo consejo a partir de mi experiencia de 25 años en el mercado laboral es hacerte una sencilla segunda pregunta: ¿estoy contento/a con lo que hago o vengo haciendo todos estos años?
Llega un momento en la vida laboral en el que puede que no estés a gusto con tu desempeño y las tareas realizadas. Es entonces cuando se debe uno preguntar, ¿qué me gustaría ser / hacer? Estoy seguro de que habrá un 99% de afinidad entre eso que nos gustaría hacer profesionalmente y aquello que se nos da bien.
Preparar mi salto profesional
Lo siguiente sería prepararse, desde nuestra actividad actual, para dar el salto más adelante. Esto implicará simultanear dos tareas a la vez, con la misma ventana temporal. Estresa, pero permite ir afianzando la actividad complementaria que nos gusta hasta el punto en que pueda generar ingresos suficientes como para dar el salto.
En función de la «tracción» que logres para tu nueva tarea paralela a tu trabajo irás viendo si puedes dar el salto antes o después. Por experiencia esto puede llevar mucho tiempo, así que conviene tener paciencia.
Revisar mi formación
El siguiente paso sería, si es necesario, revisar tu formación en la tarea que te gustaría hacer, ponerse al día. Para eso hay hoy miles de ofertas formativas presenciales, y muchas más online. Algunas de pago, pero muchas otras gratuitas. Gracias a las posibilidades de formarse que ofrece Internet no hay excusa para no formarse, a tu ritmo, cuando tengas huecos.
Apoyarme en expertos
Uno de los peores enemigos de lanzar un negocio es querer ejercer de director de orquesta. Hay gente que piensa en hacer todas las tareas ella misma. Y eso suele detraer tiempo de lo esencial: la tarea que dominas y que será tu motor comercial.
Lo aconsejable es rodearte de colaboradores que te ayuden a completar tu oferta de servicios con asuntos y tareas accesorias. Y confiar los trámites a una gestoría. Sólo liberando tus mejores horas del día de distracciones podrás dedicarte a lo que dominas, confiando lo demás a otros profesionales.
Qué es una gestoría
Una gestoría es un servicio independiente o asociado a un departamento de un negocio más grande (consultoría, asesoría, notaría, concesionario de autos, etc.) que se encarga de gestionar el papeleo del día a día de una o varias materias con las distintas administraciones.
La gestoría entiende de toda la documentación que hay que presentar a la Administración, en los plazos adecuados, para cumplir con las obligaciones de las empresas y profesionales autónomos.
Su función no es tanto asesorarte, aunque también suelen disponer de asesores de cualquier materia empresarial como liberarte de tareas administrativas. Más bien se dedican al trámite de presentar en tiempo y forma, los documentos que son necesarios para realizar una actividad económica.
Materias que tocan
Dependiendo de a qué servicio principal puedan estar adheridas, así las gestorías tocarán unos o varios palos.
Por ejemplo, en una Notaría, una de sus tareas más frecuentes será la presentación de liquidaciones de impuestos (transmisiones patrimoniales, actos jurídicos documentales, IVAs, sucesiones, donaciones, etc.) por los hechos que se documenten en escrituras notariales ante el/la Notario. También facilitan todo tipo de notas de los distintos Registros de la Administración (Registro Civil, Registro de la Propiedad, Registro Mercantil, etc.).
Por su parte, las gestorías administrativas suelen gestionar, por su cuenta o junto con asesores, los siguientes trámites de la empresa:
- Gestoría de tipo tributario o fiscal. Presentación de liquidaciones de todo tipo de impuestos (liquidaciones trimestrales de IVA, impuesto de sociedades, IRPF de personas físicas, etc.).
- Gestoría del área contable. Se encargan de presentar, por ejemplo, las cuentas anuales de una empresa en el registro Mercantil, ya sea de forma presencial o con la firma digital del cliente.
- Gestoría del área laboral. Ayudan a gestionar altas, bajas, despidos, EREs, ERTEs, ante las autoridades laborales (Seguridad Social, SMAC, tribunales de lo social etc).
- Gestoría del área mercantil. Ayudan con la llevanza de actas de consejos de administración, ordinarias y extraordinarias y con su presentación a los registros públicos. También hacen gestiones relativas a patentes y marcas.
- Gestoría Asesoría jurídica. Te representa cuando surja conflictividad de cualquier índole, incluyendo acciones judiciales.
- Asesoría financiera. Te ayuda con la gestión de tu liquidez, tesorería, préstamos, inversiones, etc.
- Asesoría familiar integral: declaraciones de la renta (IRPF), IVA, licencias de caza y pesca, permiso de conducir, etc.
Trámites con vehículos
Otras áreas donde las gestorías son muy dinámicas por el ingente volumen de negocio que se mueve son los concesionarios de vehículos nuevos, los compraventas de coches, motos, etc. y los propios particulares. Acudir a una gestoría facilita y agiliza los trámites en los diversos momentos de la vida del vehículo:
- Adquisición nuevo: documentación necesaria para la matriculación y fabricación de las placas de matrícula.
- Compraventa usado: notas de la DGT sobre el historial del vehículo, pagos de impuestos de transmisiones patrimoniales, cambios de titularidad en Tráfico, etc.
- Compraventas entre particulares: la gestoría
Titulación del gestor
Al frente de una gestoría debe haber un gestor administrativo. Los gestores administrativos son profesionales con titulación universitaria en Derecho, Economía, Empresariales (ADE) o Ciencias Políticas que se colegian en el Colegio de Gestores Administrativos de su provincia y pasan una prueba de acceso para poder ejercer su profesión y exhibir esa titulación. También lo serán quienes aprueben el Máster Universitario Oficial en Gestión Administrativa del Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos, que engloba a todos los colegios de gestores de España.
La prueba de acceso a la profesión consiste en un examen teórico tipo test con 250 preguntas sobre la profesión y en un caso práctico a elegir entre tres posibles propuestas.
Al ser expertos en derecho administrativo, representan a personas físicas y jurídicas ante cualquier administración pública. El hecho de estar colegiados da garantías al usuario de que realizan su actividad de forma profesional, estando cubierta su responsabilidad civil obligatoria con un seguro de RC como garantía. Y les permite ejercer la profesión en todo el territorio nacional.
Normativa relacionada
- Decreto 424/1963, de 1 de marzo, por el que se aprueba el Estatuto Orgánico de la profesión de Gestor Administrativo (ver online).
Juan del Real Martín
Soy economista por la Universidad Complutense de Madrid, especialización Finanzas. He alcanzado la independencia financiera y me gustaría ayudar a los demás a entender mejor los asuntos de dinero y a tomar las decisiones adecuadas en cada momento de la vida. La educación financiera es básica para que puedas lograrlo tú también.
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